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Analistas, como Jeremy Hogan, prevén un posible acuerdo a más tardar en mayo.
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Hay dudas sobre la multa de USD 125 millones impuesta a Ripple por la jueza Analisa Torres.
La comunidad de criptomonedas está a la expectativa por la posibilidad que existe de que la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) desestime la demanda contra Ripple.
Los rumores crecen al observar las recientes acciones de la SEC, los cuales muestra una flexibilización de la postura de la agencia sobre la regulación de las criptomonedas. Esto, tras los cambios favorables para las demandas contra Coinbase y Binance. La primera se desestimó y la segunda está suspendida por 60 días, tal como informó CriptoNoticias.
En consecuencia, son muchos los que esperan que mismas pausas que se tomaron en los litigios contra los exchanges, se apliquen también a Ripple. Esta posibilidad está generando un mayor optimismo con respecto a los desafíos legales de la firma.
Sin embargo, la situación apunta a que este caso será más complejo de lo esperado.
Según explica la periodista de Fox Business, Eleanor Terret, la situación de Ripple es más complicada procesalmente porque existe una orden de un tribunal de distrito para pagar una multa de USD 125 millones. Además, el caso pasó al Segundo Circuito luego de los avances impulsados en enero pasado por el expresidente de la SEC, Gary Gensler, al iniciar una apelación.
«Si bien la SEC podría optar por desestimar la apelación en el Segundo Circuito, también tendrían que encontrar la manera de acercarse al tribunal de distrito y posiblemente llegar a un acuerdo sobre la sentencia de multa (reducirla o pedir que se desestime)», señala Terret.
El proceso requerirá obtener la autorización de la jueza de distrito Analisa Torres, quien es la encargada de este caso y conservará la jurisdicción sobre el mismo hasta el 7 de agosto de este año.
Esta es una de las razones por la cual la SEC no se ha pronunciado todavía sobre Ripple, pues se sabe también que la agencia está priorizando los casos con plazos inminentes.
En ese sentido, la incertidumbre persiste porque todavía «se está en territorio desconocido». Hay una fecha límite establecida para el 16 de abril en la cual Ripple debe entregar su escrito de apertura en la apelación cruzada contra la SEC.
A pesar de ello, la mayoría de los analistas, incluyendo el CEO de Ripple, Brad Garlinghouse, conservan el optimismo en torno al resultado. El analista de criptomonedas, Jeremy Hogan, hasta prevé un posible acuerdo a más tardar en mayo.
Garlinghouse, por su parte, llamó la atención sobre las recientes acciones de la SEC, ahora bajo el gobierno de Donald Trump. Considera que el que se haya desestimado la demanda contra Coinbase es una muy buena señal para Ripple y para su criptomoneda nativa, XRP.
Basta decir (como sé que hay mucha gente impaciente, ¡incluyéndome a mí!) que esta SEC ha demostrado un claro interés en dejar atrás rápidamente (!) las fallidas políticas de regulación mediante la aplicación de la ley de la última Administración.
Brad Garlinghouse, CEO de Ripple.
Se refiere con ello a los cambios que comenzaron con la llegada de Trump a la Casa Blanca. El presidente nombró al comisionado Mark Uyeda como presidente interino, mientras se espera la nominación de Paul Atkins.
En medio de esta espera, el organismo ha comenzado a hacer cambios y ya trabaja en una nueva regulación para el ecosistema. Una tarea que está a cargo de la comisionada Hester Peirce.
«Supongo que esta SEC no está esperando a que Atkins sea confirmado antes de hacer grandes movimientos en el área de las criptomonedas», comentó Hogan.
Si la SEC retira o resuelve su caso contra Ripple, eliminaría un obstáculo legal importante para el avance de XRP. La criptomoneda se ha convertido en una de las favoritas del mercado y el cierre de la demanda de la SEC podría impulsar aún más su demanda, catapultándola al alza.
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