Ripple obtuvo una victoria parcial en su enfrentamiento en curso con la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC).
El fallo de la corte federal podría cambiar las reglas del juego para la industria de las criptomonedas, pero la saga legal está lejos de terminar.
Ripple no violó las leyes de valores, parcialmente
La jueza de distrito de Estados Unidos, Analisa Torres, dictaminó que Ripple no violó la ley federal de valores al vender XRP en exchanges de criptomonedas. Esta decisión hizo que el precio de XRP se disparara, y la criptomoneda experimentó un aumento del 104% tras el anuncio.
Sin embargo, el fallo no fue una victoria inequívoca para Ripple. El juez Torres también declaró que la empresa infringió la ley federal de valores al vender XRP a inversores sofisticados. Como resultado, Ripple aún puede enfrentar importantes obstáculos legales en el futuro.
El quid de la disputa es si la venta del token XRP nativo de Ripple, que generó miles de millones para la empresa, constituye una venta ilegal de valores.
La SEC acusó a Ripple en 2020 de recaudar 1.3 mil millones de dólares ilegalmente a través de la venta de XRP e incluyó al CEO Brad Garlinghouse y al cofundador Chris Larsen en su demanda.
Curiosamente, la decisión de Torres marcó la primera vez que un juez de Estados Unidos favoreció a una empresa de criptomonedas al considerar ciertas ventas de XRP fuera de la ley de valores de Estados Unidos.
El fallo diferenciaba entre las ventas de “oferta a ciegas” de Ripple, en las que la empresa no conocía la identidad del comprador, y las ventas directas a inversores institucionales.
Torres dictaminó que las ventas a ciegas no violaron las leyes de valores, pero las ventas directas sí.
La demanda por Ripple es fundamental para el trading cripto mundial
A pesar del fallo mixto, los ejecutivos de Ripple, en particular el director ejecutivo Brad Garlinghouse, celebraron la decisión. Lo vio como un paso en la dirección correcta para la innovación de criptomonedas en Estados Unidos.
Asimismo, Stuart Alderoty, director legal de Ripple, concluyó que la decisión del juez afirma que “la SEC no tiene jurisdicción ilimitada sobre las criptomonedas”. Expresó:
“Una gran victoria hoy, como cuestión de derecho, XRP no es un valor. Además, una cuestión de derecho: las ventas en bolsas no son valores. Las ventas de los ejecutivos no son valores. Otras distribuciones de XRP, para desarrolladores, organizaciones benéficas y empleados, no son valores.”
Torres dejó la cuestión de si Garlinghouse y Larsen son personalmente culpables. Lo son por la violación de la venta institucional para que se resuelva en un juicio con jurado.
Aunque esta decisión histórica en la demanda de Ripple constituye un paso significativo en la definición de la nebulosa relación entre las criptomonedas y la ley de valores, la batalla entre Ripple y la SEC está lejos de resolverse.
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